Permite una hidratación adecuada y un balance en los fluidos corporales de tal forma que todas las funciones fisiológicas trabajen adecuadamente, es necesario compensar las pérdidas diarias del agua, que se producen de forma normal por diversas funciones y la eliminación de líquidos corporales, como son: la orina, el sudor, la respiración, la materia fecal y en menor cantidad por las lágrimas y humedecimiento de los ojos y por el moco.